SANTO DEL DÍA
SANTA MARÍA DE LA ROSA (1813-1855)
Santa María nace en Brescia (Italia), su Madre murió cuando ella era muy pequeña, su Padre ya le había conseguido un esposo en su adolescencia pero María pidió la intercesión de su párroco para que convenciera a su Padre de la vida que quería llevar sirviendo a los más pobres y guardando castidad, su Padre aceptó y la apoyo. Santa María fundó unas asociaciones religiosas con mujeres que hacían parte del negocio de tejidos de su Padre así como la finca familiar, a ellas les infundió un fervor y piedad enormes, y un espíritu de caridad admirable, en su Parroquia también organizó retiros y misiones para acrecentar la espiritualidad de muchos, estudiaba libros religiosos y de teología y tenia mucha sabiduría . Años más tarde la peste del cólera llego a Brescia y María se ofreció en compañía de una viuda para prestar el servicio de enfermería, a muchos ayudaron y su Padre con temor le autorizó estar en los hospitales. Fueron muchas niñas que quedaron huérfanas, así que María se encarga de la administración de los talleres que los gobernantes dejaron en sus manos, pero luego ella decide fundar sus propios orfanatos, tiempo después Monseñor Pinzoni fundó una asociación piadosa de mujeres para atender a los enfermos de los hospitales y nombraron a María como Superiora aquella asociación se llamó Esclavas de la Caridad, fueron llamadas por los militares, su obra con los enfermos fue impresionantemente hermosa, un día los soldados entraron donde ellas estaban y quisieron irrespetarlas y Santa María tomo un crucifijo junto con sus compañeras que llevaban cirios encendidos y evitaron que los soldados entraran, este crucifijo se convirtió en un signo de devoción. Santa María se dirige un día al Sumo Pontífice Pío Nono para que fuera aprobada su consagración, luego por su delicada salud muere de un ataque.
Evangelio del día
San Lucas 3, 10-18
En aquel tiempo, la gente preguntaba a Juan:
«¿Entonces, qué debemos hacer?».
Él contestaba:
«El que tenga dos túnicas, que comparta con el que no tiene; y el que tenga comida, haga lo mismo».
Vinieron también a bautizarse unos publicanos y le preguntaron:
«Maestro, ¿qué debemos hacer nosotros?».
Él les contestó:
«No exijáis más de lo establecido».
Unos soldados igualmente le preguntaban:
«Y nosotros ¿qué debemos hacer?».
Él les contestó:
«No hagáis extorsión ni os aprovechéis de nadie con falsas denuncias, sino contentaos con la paga».
Como el pueblo estaba expectante, y todos se preguntaban en su interior sobre Juan si no sería el Mesías, Juan les respondió dirigiéndose a todos:
«Yo os bautizo con agua; pero viene el que es más fuerte que yo, a quien no merezco desatarle la correa de sus sandalias. Él os bautizará con Espíritu Santo y fuego; en su mano tiene el bieldo para aventar su parva, reunir su trigo en el granero y quemar la paja en una hoguera que no se apaga».
Con estas y otras muchas exhortaciones, anunciaba al pueblo el Evangelio.
Palabra del Señor
MEDITACIÓN
- Como Juan el Bautista que preparó el camino del Señor ¿Somos capaces de abrir espacio a los demás?¿Esperamos que nos agradezcan toda la vida por hacer cualquier favor?¿buscamos reconocimiento y admiración?, cuando predicamos el amor de Dios en ocasiones buscamos que nosotros seamos el centro de atención, no dejamos que las personas se acerquen a Jesucristo sino buscamos se acerquen a nosotros, nos da envidia que quienes escuchan la palabra, también sean capaces de llevar el nombre del hijo de Dios a otros, queridos hermanos no podemos dejarnos llevar por el celo, debemos vivir la vida cristiana sin apegos y con libertad, haciendo a los demás solo libres en el Señor.
- El arte de compartir no permite valerse de otros sino sólo de Jesucristo, los cargos, los puestos, las posiciones pasan, pero mi tarea y mis esfuerzos deben ser enseñar, guiar y soltar para que otros también edifiquen reino de Dios, te has preguntado ¿Qué debemos hacer?, la respuesta es fácil ponernos en acción, debemos dar de lo que somos de lo que Dios nos ha dado por gracia, para que otros también caminen en la misma dirección eterna, Juan el Bautista agoto todos los esfuerzos por anunciar al Mesías, igualmente debemos ser Juanes Bautistas que compartan el mensaje en este mundo actual.
- Juan el Bautista fue muy contundente en sus respuestas, sus consejos no se basaron en cambiar de oficio sino de tener una actitud diferente en los mismos, sus respuestas determinantes llevaban a muchos a preparar su vida como camino de salvación para la dulce espera de quien ha de venir Jesucristo, aun en la actualidad necesitamos de alguien que nos oriente y nos ayude a discernir ¿Qué debo hacer?
PRÁCTICA DIARIA
- Invitar con alegría a un amigo (a) que no haya tenido la experiencia de ir a misa, motivarlo para que busque a Dios a través de la Eucaristía.
- Santa María de la Rosa nos enseña: “Haga todas las obras solo para dar solo gusto a Dios”