JUEVES, Segunda Semana de Adviento -12 de Diciembre, 2024

SANTO DEL DÍA

NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE (1531)

En el Valle de México habitaban los Indios Aztecas hace muchos años, y no conocían de Jesús, así que algunos sacerdotes Españoles viajaron hasta México y evangelizaron a los Indios entre ellos San Juan Diego que se hizo bautizar junto con su Esposa, un sábado cuando este Indio pasó por el Cerro de Tepeyac para llegar a Tlatelolco, escuchó una dulce voz de una Señora, que le preguntaba a donde iva, y le hizo una petición al Indio para que se le construyera un templo y poder prestar su auxilio a los pecadores, y también le ordenó fuera donde el Obispo, pero Juan Diego al contarle al Obispo no le creyó, así que al aparecérsele nuevamente la Virgen María le dijo que enviará alguien más importante que él, entonces La Santísima Madre de Jesús le dijo que se dirigiera a la punto del cerro y allí cortará unas flores y se las llevará al obispo como prueba de su aparición y petición de la construcción de un templo, Juan Diego hizo lo mandado, al soltar su ayate las rosas cayeron al suelo y apareció dibujada en la tela la preciosa imagen de la Virgen de Guadalupe, desde ese momento el Obispo Fray de Zumárraga creyó y conservó el ayate y luego lo traslado a la ermita construida en el Cerro de Tepeyac.
San Pío X elevó el santuario de México a la categoría de Basílica y proclamó a la Virgen de Guadalupe, Patrona de toda América Latina.

San Mateo 11, 11-15

En aquel tiempo, dijo Jesús al gentío:
«En verdad os digo que no ha nacido de mujer uno más grande que Juan el Bautista; aunque el más pequeño en el reino de los cielos es más grande que él.
Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora el reino de los cielos sufre violencia y los violentos lo arrebatan. Los Profetas y la Ley han profetizado hasta que vino Juan; él es Elías, el que tenía que venir, con tal que queráis admitirlo.
El que tenga oídos, que oiga».

Palabra del Señor

  • El evangelio de hoy se traduce, a poner a los demás en primer lugar en servir sin esperar reconocimiento, es es el mayor en el reino de los cielos, Jesús no permitió que nadie se creyera más que nadie, él más grande es él que cumple con el servicio, Juan Bautista es presentado por Jesucristo como un modelo de servicio y humildad, en su tiempo le fui difícil como en el tiempo de Jesús, incluso como en este tiempo, dar a conocer el reino de Dios frente a tanta incredulidad, injusticias, pero ser grande en el reino de los cielos se caracteriza por ser el servidor de todos.
  • En este tiempo de adviento, ¿nos estamos dejando interpelar por el mensaje de preparación que nos hace la Palabra, o estamos permitiendo que las preocupaciones de este mundo nos arrebaten a Dios, que el centro y sentido de la vida misma?, la palabra de Dios sin duda alguna nos permite entender los hechos de nuestra vida para vivir con plenitud y propósito según la voluntad de Dios, pero se debe oír con los oídos del alma.

  PRÁCTICA DIARIA

  • Servir en todo momento y lugar a ejemplo de los grandes profetas, y a ejemplo del hijo de Dios Padre.
  • Nuestra Señora de Guadalupe ruega por nosotros.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *