
SANTO DEL DÍA
SAN MARCELO DE LEÓN
San Marcelo de León fue un centurión romano que perteneció a la legión Legio VII Gemina. No obstante, y de forma repentina, decidió dejar de lado su función de soldado, desprendiéndose de su cinto y espada y alegando que el único ejército en el que serviría sería en el de Jesucristo. Una acción que le llevó a ser condenado a la muerte por decapitación y ser reconocido como mártir.
Evangelio del día
San Lucas 13,22-30
En aquel tiempo, Jesús pasaba por ciudades y aldeas enseñando y se encaminaba hacia Jerusalén.
Uno le preguntó:
«Señor, ¿son pocos los que se salvan?».
Él les dijo:
«Esforzaos en entrar por la puerta estrecha, pues os digo que muchos intentarán entrar y no podrán. Cuando el amo de la casa se levante y cierre la puerta, os quedaréis fuera y llamaréis a la puerta diciendo:
“Señor, ábrenos”;
pero él os dirá:
“No sé quiénes sois”.
Entonces comenzaréis a decir:
“Hemos comido y bebido contigo, y tú has enseñado en nuestras plazas”.
Pero él os dirá:
“No sé de dónde sois. Alejaos de mí todos los que obráis la iniquidad”.
Allí será el llanto y el rechinar de dientes, cuando veáis a Abrahán, a Isaac y a Jacob y a todos los profetas en el reino de Dios, pero
vosotros os veáis arrojados fuera. Y vendrán de oriente y occidente, del norte y del sur, y se sentarán a la mesa en el reino de Dios.
Mirad: hay últimos que serán primeros, y primeros que serán últimos».
Palabra del Señor
MEDITACIÓN
- Muchos de nosotros día a día anhelamos obtener éxito, que todo nos salga tal y como lo planeamos, que las personas respondan a nuestras expectativas, en resumidas cuentas que la vida gire entorno a mis deseos y pretensiones, pero la pedagogía que Jesucristo nos enseña es totalmente diferente a esta forma de ver y pensar la vida, para entrar al cielo, para obtener lo eterno se debe renunciar a uno mismo, es decir entrar por la puerta estrecha, es dejar todo aquello que creo es prioridad, hacerme humilde y pequeño para poder pasar por aquel espacio, la puerta estrecha me permite vivir los sufrimientos, los desafíos con paciencia y amor, saber que la cruz es el camino que nos conduce hacia la vida eterna.
- Además nos preguntamos a menudo ¿Por qué para conseguir lo que nos hace feliz debemos luchar, esforzarnos, no es fácil?, y la respuesta está en Jesucristo que nos dice que tomemos nuestra cruz y le sigamos, este mundo ofrece apariencias, felicidades temporales, pero no una eternidad feliz, todo en la tierra es superfluo e inconstante, es por eso que ir en contra del mundo nos hace santos y merecedores del cielo, en la tierra todos van al mismo abismo, una puerta espaciosa, sin obstáculos, fácil, pero vacía lamentablemente, hoy nos preocupamos como debemos vivir aquí pero no te preguntas como vivirás después de la muerte.
- Hoy en día vemos a muchos enriquecerse fácilmente, ¿Pero será que aquella felicidad que le dan las comodidades permanecerá para siempre? pregúntate tu hoy, ¿Por cual puerta estoy conduciendo mi vida ahora mismo?¿Ha sido mi vida llena de tropiezos para alcanzar la felicidad plena, la paz, el amor?«Si en tu caminar no te golpeas de frente con el diablo, es porque estás caminando en la misma dirección que él» San Juan María Vianney.
PRÁCTICA DIARIA
- Evitar una vida acomodada espiritualmente, esforzarme por trascender aquellas cosas buenas que hago, alegrarme cuando hallan tribulaciones es buen signo de que vas por la puerta estrecha.
- San Marcelo nos enseña que debemos renunciar a la vanagloria humana para vivir la gloria del cielo.