
SANTO DEL DÍA
SANTA ROSALÍA (1130-1160)
Santa Rosalía vivió en Palermo (Sicilia) fue una joven virgen que según cuenta la leyenda se dice que a sus catorce años se retiro a una montaña cerca de Palermo como ermitaña para dedicarse a la oración y a la penitencia, después que falleció se le aparece a una mujer enferma para que visitara el monte Pellegrino con el fin de que encontrarán sus restos.
Evangelio del día
San Lucas 4,38-44
En aquel tiempo, al salir Jesús de la sinagoga, entró en la casa de Simón.
La suegra de Simón estaba con fiebre muy alta y le rogaron por ella.
El, inclinándose sobre ella, increpó a la fiebre, y se le pasó; ella, levantándose enseguida, se puso a servirles.
Al ponerse el sol, todos cuantos tenían enfermos con diversas dolencias se los llevaban, y él, imponiendo las manos sobre cada uno, los iba curando.
De muchos de ellos salían también demonios, que gritaban y decían:
«Tú eres el Hijo de Dios».
Los increpaba y no les dejaba hablar, porque sabían que él era el Mesías.
Al hacerse de día, salió y se fue a un lugar desierto. La gente lo andaba buscando y, llegando donde estaba, intentaban retenerlo para que no se separara de ellos.
Pero él les dijo:
«Es necesario que proclame el reino de Dios también a las otras ciudades, pues para esto he sido enviado».
Y predicaba en las sinagogas de Judea.
Palabra del Señor
MEDITACIÓN
- En este pasaje bíblico Jesús sana a quienes están a su alrededor a los de su comunidad, a quienes le siguen, él no ignora la suplica del enfermo sino que se detiene para sanar y liberar, él se interesa por quienes confían en su poder y se abandonan en sus manos que limpian y devuelven la salud. La suegra de Pedro se levanta al ser sanada y sirve enseguida a todos, cuando Jesús llena de su amor a los seres humanos la primera iniciativa para responder a ese amor es el servicio.
- Muchos querían encontrar a Jesús para ser curados, pero el Maestro huye de aquel lugar para orar , todo el tiempo se retiro para estar en la presencia de Dios, en conexión con su Padre, él decide no estar en la zona de confort, decide buscar otros lugares, aprovecha el tiempo al máximo para cumplir su misión.
- Si nos disponemos a confiar en la providencia divina sabremos que nada nos faltará, y todo lo podremos sobrellevar, Jesús tiene compasión de nuestra persona a cada momento va a nuestro encuentro, y se deja encontrar pues sabe de nuestra necesidad, pero no debemos tener a Jesús como nuestro curandero, como un Dios a quien hacemos listas de peticiones, sino que debemos ser hombres y mujeres dedicados a servir, a renovar nuestro pensar y actuar, cuando somos sanados de cualquier dolencias al tiempo nos olvidamos de ser agradecidos y retornamos a nuestra vida pasada, dejamos a Dios en el olvido, nuestra entrega como cristianos debe ser constante estar siempre buscando de Jesús debe ser nuestro pensar diario en las tristezas y las alegrías.
- Si hemos decidido seguir a Cristo debemos ser discípulos que vayan de un lugar a otro, no quedarnos en las mismas comunidades que hablan bien de mi y me tratan bien, sino ir aquellas donde se necesite, Jesús nos enseña que su misión en esta tierra nunca se detuvo, y nos invita a hacer nosotros lo mismo, a donarnos a donde quiera que vayamos a anunciarle a todos a si no sean de mi comunidad, la oración permanente me permite estar en conexión con Dios para hacer su voluntad a donde quiera enviarme.
PRÁCTICA DIARIA
- Invocar el nombre de Jesús en las alegrías y tribulaciones
- Como Santa Rosalía necesitamos de la oración permanente para hacer la voluntad de Dios en esta tierra.