MARTES, Primera Semana de Cuaresma (ciclo b) -20 febrero, 2024

SANTO DEL DÍA

San Tiranio fue un Obispo de Tiro que junto a Cenobio que era medico y sacerdote de la ciudad de Sidón los tomaron presos y los condujeron a Antioquía al martirio, a San Tiranio después de torturarlo lo arrojaron al rio Orantes y San Cenobio murió en el potro, ellos soportaron con paciencia y fe aquellos sufrimientos, a otros los tiraron a los jabalíes, leopardos, osos salvajes, pero estas fieras no les hacían nada, en muchos intentos e incitando a los cristianos a provocar aquellos animales no pudieron lograr su objetivo, así que decapitaron finalmente aquellos hombres y los arrojaron al mar, otros fueron quemados, apaleados y martirizados a causa de no adorar dioses.

Evangelio del día

San Mateo 6,7-15

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:

«Cuando recéis, no uséis muchas palabras, como los gentiles, que se imaginan que por hablar mucho les harán caso. No seáis como ellos, pues vuestro Padre sabe lo que os hace falta antes de que lo pidáis. Vosotros orad así:

“Padre nuestro que estás en el cielo,
santificado sea tu nombre,
venga a nosotros tu reino,
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo,
danos hoy nuestro pan de cada día,
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden,
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal”.

Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, también os perdonará vuestro Padre celestial, pero si no perdonáis a los hombres, tampoco vuestro Padre perdonará vuestras ofensas».

Palabra del Señor

  • Jesucristo revela a sus discípulos una nueva forma de comunicarse con Dios Padre, y lo hace mediante una crítica constructiva, que muestra el verdadero sentido de la oración, no es que Jesús estuviese en contra de rezar como lo hacían los gentiles, sino que la manera como se hacía se desviaba del verdadero propósito, que es hablar con Dios cariñosamente sin palabras premeditadas, sino que expresando con espontaneidad lo que hay en el corazón sean escuchadas con agrado las peticiones y agradecimientos que se elevan al Padre Celestial.
  • Jesús muestra un modelo para orar eficazmente, el Padre nuestro, este se convierte es una oración integral que abarca en su totalidad todo lo que se quiere decir a Dios,  muestra a Dios como  un Padre de todos, un confidente, que escucha con atención las peticiones de sus hijos, manifestando  un Dios más cercano a la necesidad del hombre, y también revela la misericordia de un Dios que perdona y pide se perdone.
  • Nuestra oración es mecánica en muchos momentos, al iniciar lo primero que hacemos es expresar nuestra lista de peticiones, nos dirigimos a Dios como si él necesitará de nosotros, como sí Dios tuviera la obligación de concedernos todo cuanto queramos y no solo eso nos basta, sino que decimos a Dios como hacerlo, además imploramos a Dios se perdonen nuestros pecados, sin darnos cuenta que primero debemos perdonar para obtener el perdón de aquel que es todo amor.
  • Jesús nos pide hablarle a Dios sinceramente como a nuestro padre, sabiendo que conoce todo de nosotros, nuestras angustias, necesidades y hasta agradecimientos, pues  nos creó,  solo anhela que nuestra comunicación con él sea íntima, necesaria y constante, sabiendo que la acción que se enfoca se potencializa, este buena práctica de la oración, debemos hacerla nuestro pan diario, pues nos permite escuchar su voz en nuestro interior dando respuesta a lo que pedimos, en este tiempo de cuaresma se nos invita a orar más que hablar, la oración se hace silencio eficaz para obtener aquello que anhelamos según la voluntad de Dios.

  PRÁCTICA DIARIA

  • Desde hoy rezaré el Padre nuestro todos los días de mi existencia, enseñarlo a quien no sabe esta preciosa oración enseñada por Jesucristo.
  • San Tiranio, San Cenobio y otros martires me enseñan a buscar la salvación donando mi propia vida por y para Jesucristo.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *