
SANTO DEL DÍA
SAN JACOBO DE PERSIA (270-338)
San Jacobo nace en una familia cristiana piadosa, sus Padres le infundieron el amor por la oración y la lectura de las sagradas escrituras, San Jacobo le encargan años más tarde un cargo en la corte del emperador, pero sintió miedo de negar su fe en Cristo y de ofrecer sacrificios a ídolos, su Madre y esposa le envían una carta para que se arrepienta de sus pecados que cometía en aquel oficio, entonces el santo llora pidiendo perdón a Dios. Un día mientras se encontraba en su habitación en fervorosa oración, lo escuchan sus compañeros y van en seguida a contarlo al emperador que lo llama a interrogar, haciendo que niegue su fe pero, declara su fe en Jesús y es condenado a muerte, comienza la tortura, amputándole los dedos y luego sus piernas y brazos luego deciden decapitarlo, mientras sucedía este horroroso evento oraba agradeciendo a Dios ofrecimiento de su martirio por las ofensas cometidas al Dios altísimo.
Evangelio del día
San Lucas 21,1-4
En aquel tiempo, Jesús, alzando los ojos, vio a unos ricos que echaban donativos en el tesoro del templo; vio también una viuda pobre que echaba dos monedillas, y dijo:
«En verdad os digo que esa viuda pobre ha echado más que todos, porque todos esos han contribuido a los donativos con lo que les sobra, pero ella, que pasa necesidad, ha echado todo lo que tenía para vivir».
Palabra del Señor
MEDITACIÓN
- Jesús en este pasaje bíblico ve la generosidad de una viuda, ve en aquella mujer perder todo por ganar mucho, mientras que aquellos que daban de lo que les sobra, no ve ningún merito, ve solo un cumplimiento, a Dios no le importa la cantidad le interesa la calidad del corazón del hombre con cuanto amor se dona, y con cuenta entrega sirve.
- Jesucristo aprovecha cada situación de la vida ordinaria para mostrar a sus discípulos la verdad a la que han sido llamados, entregar todo a Dios, exige dejar todo por seguirle, dar lo mejor de si mismo es lo que realmente importa, Jesús les enseña el valor de ser fiel en las pequeñas cosas, no tener presunción , sino dar a Dios lo que le corresponde es la clave del servicio, es la clave del amor.
- La generosidad se convierte en una cualidad excepcional para los cristianos, que indica el papel que debemos desempeñar como buenos administradores de la creación, todo es de Dios y nosotros sólo debemos devolver el doble de lo que se nos ha confiado, muchas veces decimos no violamos el mandamiento de robar, pero robamos a Dios en el tiempo porque la mayor parte de nuestro día lo dedicamos a trabajar para obtener cosas materiales, ¿ Y donde queda el tiempo que debemos invertir para Dios?, ¿Te has hecho esta pregunta?, pues es bueno que comencemos a reflexionar sobre esto, ¿Dedicamos parte de nuestra vida anunciarlo y agradarle, o pasamos dormidos en los placeres de este mundo?.
- En ocasiones pensamos que la gratuidad consiste en dar el diezmo, las ofrendas, ayudas, que de lo demás se encargan los consagrados, que equivocados estamos cada uno debe mostrar esa parte buena de su alma que dono a Dios con amor y sin interés, dar sin recibir nada a cambio, debe ser nuestro pensar, ofrecer lo que tenemos es lo realmente valioso para Dios, hay gente de escasos recursos que da con tanto amor a Dios. Hoy estamos llamados a compartir nuestras riquezas materiales y espirituales con los más necesitados.
PRÁCTICA DIARIA
- Hoy daré lo mejor de mi a quienes me necesitan, buscaré aquellas personas que e negado ayuda, y que he ignorado por mi presunción y orgullo.
- San Jacobo me enseña que el poder y las riquezas no son más importantes que mi fe en Dios.