
SANTO DEL DÍA
SAN BARTOLOMÉ (Siglo XVI)
San Bartolomé nació en Caná de Galilea fue uno de los doce apóstoles que tenía como nombre Natanael, fue invitado por Felipe para que conociera a Jesús y le siguiera, dice la tradición que después de la Ascensión de Jesucristo fue a la India, a Frigia y Armenia a proclamar el Evangelio y convirtió a muchos al cristianismo, fue martirizado le quitaron la piel estando a un vivo, muere por Jesús para dar gloria a su nombre, dejando una copia del evangelio de Mateo en arameo.
Evangelio del día
San Juan 1,45-51
En aquel tiempo, Felipe encuentra a Natanael y le dijo:
«Aquel de quien escribieron Moisés en la ley y los profetas, lo hemos encontrado: Jesús, hijo de José, de Nazaret».
Natanael le replicó:
«¿De Nazaret puede salir algo bueno?».
Felipe le contestó:
«Ven y verás».
Vio Jesús que se acercaba Natanael y dijo de él:
«Ahí tenéis a un israelita de verdad, en quien no hay engaño».
Natanael le contesta:
«¿De qué me conoces?».
Jesús le responde:
«Antes de que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi».
Natanael respondió:
-«Rabí, tú eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel».
Jesús le contestó:
«¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera, crees? Has de ver cosas mayores».
Y le añadió:
«En verdad, en verdad os digo: veréis el cielo abierto y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre».
Palabra del Señor
MEDITACIÓN
- Felipe movido por la presencia de Dios hace una invitación a Natanael para que vea con sus propios ojos a Jesús, no quería ponerse a indagar sobre la respuesta de Natanael, sólo quería que conociera al verdadero Mesías y fuera parte de su grupo de seguidores, Natanael fue un poco incrédulo de la procedencia de Jesús, pero al escuchar el elogio que Jesús le hace, lo reconoce como al Maestro. Nadie se había expresado de él así considerándolo un hombre bueno y es Jesús que resalta el valor de su interior.
- Jesucristo conocía a Natanael y supo desde el principio, desde el momento que lo vio debajo de la higuera que sería uno de sus discípulos, proyecto su misión como un verdadero evangelizador. Natanael no se imaginó que Jesús le encargara semejante responsabilidad, pero no, sin antes reconocer que era el hijo de Dios. Jesús revela a Natanael que cumpliendo su encargo ganara el cielo y es ahí donde verá la majestuosa gloria de Dios, no en este mundo sino en el mundo venidero.
- Compartir mi experiencia de Dios con los demás me hace merecedor de la vida eterna, invitar a los que están a mi alrededor para que conozcan de Jesús me hace evangelizador, sólo es dejar que vean la gracia que Jesús ha depositado en mí, pero debo dejar que Dios obre en mi vida, debo responder fielmente a su llamado, muchas veces somos escépticos y no confiamos en las capacidades de otros, subestimar a los demás, me hace una persona egoísta y egocentrista, que solo ve la apariencia y no ve más allá, nuestro interés por los hombres debe basarse en lo que son como personas , mirar el interior como lo hizo Jesús con Natanael, dar valor y dignidad a quien no es tenido en cuenta, Dios conoce todo de nosotros y sabe cuál es nuestra misión en esta tierra, él nos llama y nos envía a otros.
- El ser humano esta cobijado por la duda, y esta ceguera le impide reconocer quien debe ser Jesús en nuestras vidas, en nuestros hogares, en nuestra sociedad, cada vez somos muchos los que seguimos a Jesucristo por un pasa tiempo, por obligación, o porque nos ha hecho un milagro, pero debemos abrir los ojos y reconocerlo, más adelante nuestra recompensa será mayor que lo que pudiésemos imaginar, recibir una vida que no termina, y contemplar cara a cara a nuestro salvador.
PRÁCTICA DIARIA
- Invitar con alegría a un amigo (a) que no haya tenido la experiencia de ir a misa, motivarlo para que busque a Dios atraves de la Eucaristía.
- San Bartolomé escucho el llamado de Dios, como él entreguemos nuestra vida a servir en la misión de mi parroquia, ser humildes y obedientes hasta el fin de mi vida.