
SANTO DEL DÍA
SAN JUAN EUDES (1601-1680)
San Juan Eudes nació en Francia, desde niño se reflejaba en él, el amor por Dios, cuando tenia catorce años ingresó al colegio de los jesuitas, pero su padres querían que se casara, él decidió entonces ir al seminario, años más tarde se ordena sacerdote, y comienza a trabajar por los enfermos ya que en Normandía se estaba travesando por la peste, también comenzó a recoger mujeres de la calle para llevarlas a familias piadosas que las acogían y las motivaban a trabajar en labores decentes, luego después de muchos años con esta gran misión consigue una casa para albergar estas mujeres, después con la ayuda de Magdalena Lamy fundaron una Congregación que se llamó las Hermanas de Nuestra Señora de la Caridad del Refugio, un año después publicó un libro llamado. “La Devoción al Adorable Corazón de Jesús”, también escribió un tratado sobre “el Admirable Corazón de la Santísima Madre de Dios”, fundó seminarios ,su vida la dedicó al servicio de los pecadores y a convertir almas para Jesucristo, esmerándose también por formar sacerdotes santos.
Evangelio del día
San Mateo 19,13-15
En aquel tiempo, le presentaron unos niños a Jesús para que les impusiera las manos y orase, pero los discípulos los regañaban.
Jesús dijo:
«Dejadlos, no impidáis a los niños acercarse a mí; de los que son como ellos es el reino de los cielos».
Les impuso las manos y se marchó de allí.
Palabra del Señor
MEDITACIÓN
- Jesús ve en los niños la pureza del corazón, ve santidad, cosa que los discípulos no ven, Jesús acoge aquellos que pertenecen al reino de los cielos , los más pequeños, los más tiernos y vulnerables, son los que enseñan como se debe comportar un verdadero hijo de Dios. Jesús les impone las manos para bendecir lo que de alguna manera es santo, mirando sus ojos puede percibir el rostro de Dios en ellos.
- Jesús invita a sus discípulos a imitar a aquellos que no encuentran barreras para acercarse a Dios, aquellos que no se tienen en cuenta por su falta de experiencia, pero son los más importantes y ocupan el primer lugar en el cielo y enseñan los secretos de una vida sin manchas, invita a todos sus oyentes a conservar y reflejar la inocencia de un niño, el cariño y la ternura que ellos irradian con sus sonrisas.
- En esta sociedad en la que los niños son abusados cruelmente desde sus hogares o incluso en la Iglesia, es donde se debe siempre tener como prioridad la atención y el cuidado de los más pequeños, para conservar su inocencia y preservarlos de todos aquellos que quieran violentarlos, muchas ideologías están inculcando libertinaje sexual a nuestros niños y niñas, y es ahí donde nuestra misión es mantener intacto la dignidad de nuestros menores, aunque el mundo este contaminando su ambiente bien sea directa o indirectamente es cuando debemos trabajar duramente en nuestras familias para que los principios y valores estén firmes y bien formados en la vida de nuestros hijos o familiares menores de edad, para que al momento de enfrentarse a este mundo corrompido sepan ser luz en las tiieblas.
- ¿He perdido mi inocencia dejándome influenciar por el mal ?¿ Que estoy aportando a esta sociedad, para cuidar de nuestros niños y niñas? Hoy Jesús nos hace un llamado de atención, especialmente a los padres de familia para que brinden amor y atención a los menores de edad, mostrar un interés sincero por su bienestar, enseñarles el amor a Dios y temor hacia él para que a lo largo de sus vidas puedan caminar conforme a la voluntad del Señor.
PRÁCTICA DIARIA
- Enseñar el Padrenuestro a los niños de mi hogar o a quienes viven a mi alrededor, amar a Jesús y a cumplir sus mandamientos, motivarlos asistir a la iglesia, e invertir tiempo para formarlos en la fe, alimentándolos desde pequeños de la palabra de Dios, descubrir dones y talentos en ellos que puedan servir en nuestra parroquia.
- San Juan Eudes nos enseña que desde niños debemos asistir a la Iglesia y enamorarnos de Jesús, es esta la etapa de la vida exacta para crecer en gracia de Dios, y creciendo seamos portadores del mensaje de Jesús con nuestro testimonio de vida.