SANTO DEL DIA
PRÓSPERO DE AQUITANIA (+ 463)
Fue un seglar que frecuentó el monasterio de San Víctor ubicado al sur de Francia, se dice que se casó y permaneció como laico comprometido, defendió de los seguidores de Pelagio las doctrinas de San Agustín de Hipona sobre el don de la perseverancia y la predestinación de los santos, convirtiéndose en una lucha de alto nivel, viajó a Roma para seguir en la causa de proteger la fe, años después termina su días como secretario del papa San León Magno, se dice que aporto de sus conocimientos para la redacción de la Epístola Dogmática.
Evangelio del día
San Mateo 10,26-33
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«No tengáis miedo a los hombres, porque nada hay encubierto, que no llegue a descubrirse; ni nada hay escondido, que no llegue a saberse.
Lo que os digo en la oscuridad, decidlo a la luz, y lo que os digo al oído, pregonadlo desde la azotea.
No tengáis miedo a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar el alma. No; temed al que puede llevar a la perdición alma y cuerpo en la “gehenna”. ¿No se venden un par de gorriones por un céntimo? Y, sin embargo, ni uno solo cae al suelo sin que lo disponga vuestro Padre. Pues vosotros hasta los cabellos de la cabeza tenéis contados. Por eso, no tengáis miedo: valéis más vosotros que muchos gorriones.
A quien se declare por mí ante los hombres, yo también me declararé por él ante mi Padre que está en los cielos. Y si uno me niega ante los hombres, yo también lo negaré ante mi Padre que está en los cielos».
Palabra del Señor
MEDITACIÓN
- Jesús invita a sus oyentes a no tener miedo, ni ahogarse en preocupaciones innecesarias, que paralizan el accionar el bien, recuerda que es él, el baluarte que sostiene a todos, sin su voluntad nada se hace sobre la tierra. Cristo se hace asimismo la verdad, la verdad que triunfa, en el tiempo de Dios todo es perfecto, su justicia es eterna y dará a cada uno lo que le corresponda según sus obras, que el temor se base en no perder el alma en pocas palabras el cielo. El príncipe de este mundo está a cada momento interrumpiendo el plan de Dios, confundiendo a todas las personas, pero Dios anima a seguir resistiendo porque sabe que la recompensa para quien le sigue no es para este mundo terrenal sino para el mundo venidero. Todos los cabellos de nuestra cabeza están contados, es una expresión del magnífico amor que Dios tiene por la raza humana, conociendo a totalidad lo que hay en cada persona resalta el valor incalculable que como obra perfecta de la creación es cada uno de sus hijos.
- Jesús tiene un profundo conocimiento del ser humano, y sabe que convencer y anunciar su verdad a las comunidades de hoy es una tarea difícil, el orgullo puede hacer que las personas marchen bajo el régimen de esta mundo y por poder compaginar y ser parte de una sociedad, muchos caen en el error de negarlo, pero advierte que si darlo a conocer es un impedimento, no habrá más remedio que el Padre Celestial no les haga participes de su promesa de salvación.
- El cristiano de esta generación, no tiene esperanza, es cobarde y acomodado, pues trabaja en las cosas de Dios hasta donde le sea posible, sin esfuerzos, ni sacrificios de amor, sin tener problemas, ni obstáculos, es por eso que Jesús nos pide darlo todo sin dudar que él es nuestro apoyo, que va a nuestro lado, que así no le veamos en la oscuridad, sepamos que su vara y su cayado nos sosiegan, dar hasta la misma vida por los demás, anunciarlo hasta el cansancio, arriesgar todo por la salvación de muchos y de la mía propia.
- No se atrae a las personas por proselitismo sino por convicción, anunciar a Cristo no requiere de estrategias vagas, sino de testimonios y experiencias en Dios que unidos a la verdad que es Jesús, generen en quien me observa deseos de cambiar y caminar en la fe.
PRÁCTICA DIARIA
- Anunciar a Jesús en mi trabajo, en el colegio, en mi casa, en las comunidades, en el ambiente donde me desarrollo sin miedo hacer burlado, pidiendo la guía del Espíritu Santo me lanzo a esta nueva aventura de amor.
- San Prospero se destacó por defender la fe a costa de su misma vida, como el santo, no pasemos por este mundo sin dejar huellas en beneficio nuestro y de los demás.
El evangelio de hoy nos deja una gran enseñanza que debemos dejar buenas huellas ,se refiere en nuestras acciones en nuestro hablar, dando un buen consejo de aliento al que lo necesita y ayudar a los demás sin esperar nada cambio darlo todo así como Jesucristo lo dio por nosotros con amor murió en la cruz para darnos vida eterna . Pero el no que no quedo ahí vive siempre nuestros corazones por eso permite a el estar en comunión alimentándose de la eucaristía.