SABADO, Duodécima Semana del Tiempo Ordinario,28 de junio,(Ciclo c)

La fiesta al Inmaculado Corazón de María, fue instituida por el Papa Pio XII, se celebra el sábado siguiente a la
solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, el papa Juan Pablo II nos recuerda que
es sumamente importante conmemorar esta celebración. La Encarnación del hijo de
Dios en María Santísima, esta relación estrecha entre María y Jesús nos muestra
el grande amor de Dios por la humanidad, escoge una criatura de este mundo para
manifestar su gloria.

María con su valiosa  intercesión nos lleva de la mano a  Jesús y
nos dice que hagamos lo que él nos pida, el corazón de María manifiesta el amor
de Dios que ha sido derramado en ella por medio del Espíritu Santo, es por eso
que el Corazón de Jesús está ligado al de María, la devoción a esta festividad
debe despertar en nosotros el deseo de buscar a Jesús en los brazos maternales
de María buscar en ella a Jesús  nos hace merecedores de las gracias que
Dios nos promete.

Evangelio del día

San Lucas 2, 41-51

Los padres de Jesús solían ir cada año a Jerusalén por la fiesta de Pascua.

Cuando Jesús cumplió doce años, subieron a la fiesta según la costumbre y, cuando terminó, se volvieron; pero el niño Jesús se quedó en Jerusalén, sin que lo supieran sus padres.

Estos, creyendo que estaba en la caravana, anduvieron el camino de un día y se pusieron a buscarlo entre los parientes y conocidos; al no encontrarlo, se volvieron a Jerusalén buscándolo.

Y sucedió que, a los tres días, lo encontraron en el templo, sentado en medio de los maestros, escuchándolos y haciéndoles preguntas. Todos los que le oían quedaban asombrados de su talento y de las respuestas que daba.

Al verlo, se quedaron atónitos, y le dijo su madre:
«Hijo, ¿por qué nos has tratado así? Tu padre y yo te buscábamos angustiados».

Él les contestó:
«¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais que yo debía estar en las cosas de mi Padre?».

Pero ellos no comprendieron lo que les dijo.

Él bajó con ellos y fue a Nazaret y estaba sujeto a ellos.

Su madre conservaba todo esto en su corazón.

Palabra del Señor

  • La angustia de María y José, nubla la misión que se les ha encomendado, no les deja comprender a profundidad las insondables obras de Dios. Debemos confiar en el Señor, así no entendamos sus planes, tiene siempre un propósito trazado para nosotros, solo debemos aprender hacer su voluntad. En la Eucaristía  encontramos una parte de María unida al cuerpo y sangre de su hijo Jesús, una parte de ella está contenida en Cristo humano y divino, su corazón aunque humano tiene sentires especiales. Aprendamos de María a tener un corazón dispuesto, sin ninguna barrera, abrámonos al plan de Dios, ella es Maestra por excelencia, pues nos invita a obedecer aun en el miedo y las dudas.
     Jesús quiere mostrarnos que no debemos buscar a Dios fuera de nosotros sino en nosotros, él está ahí en lo más profundo de nuestro corazón, si dejamos que su Espíritu Santo penetre nuestra intimidad, si escuchamos su voz sabremos hacer las cosas que él nos pide que hagamos y estas al instante cobrarán sentido, porque nuestro interés debe ser hallar el camino que Dios tiene trazado para quien decide seguirle, hoy es un buen día para pedir la intercesión de María, ella sin duda alguna siempre nos llevará a su hijo.

PRÁCTICA DIARIA

  • Rezar el Santo Rosario.
  • La devoción al Inmaculado Corazón de María me motiva a amar a Jesucristo como lo hizo su Madre, María me enseña que para alcanzar el cielo se debe amar con el corazón de Jesucristo un mismo latir, con el mismo amor..

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