JUEVES,SEMANA DE LA OCTAVA DE PASCUA,24 de Abril- (ciclo c)

SANTO DEL DIA

San Fidel nació en Alemania, desde pequeño fue muy inteligente , fue profesor muy estimado de los jóvenes de las familias de Suabia (Alemania) , fue defensor en temas de derecho gratis para los pobres, lo que ganaba como profesor y abogado lo empleaba en limosnas, años más tarde al ver que su profesión le creaba dolores de cabeza por tantas injusticias que se cometían, entonces renunció e ingreso a los capuchinos, dividió sus bienes en dos uno para los pobres y otro para costear los estudios de los seminaristas sin recursos, consiguió la conversión de protestantes, sus predicaciones llegaban a los más humildes, era asiduo en la oración, hasta los herejes lo escuchaban, pero recibía constantemente cartas de que no hablara tanto de la religión católica, como está frase: “Recuerde que está predicando en tierras donde hay muchos protestantes, evangélicos, calvinistas y demás herejes. No hable tan claro en favor de la religión católica, si es que quiere seguir comiendo tranquilamente su sopa entre nosotros”, fueron directamente amenazas, pero él no paraba sino que sigue insistiendo en que debían volver a la religión católica, tiempo después lo enviaron con un grupo de misioneros que tenían que ir a predicar en Suiza, allí habían muchos protestantes calvinistas, ya se escuchaban rumores de que seria asesinado por su hermosa predicación y por miedo a que muchos protestantes se convirtieran al catolicismo, el día en que iva a ser asesinado llegó al templo oro y en donde encontró un papel que decía: “Este será su último sermón. Hoy predicará por última vez”. Se armó de valor y empezó entusiasta su predicación. El tema de su sermón fue esta frase de San Pablo: “Una sola fe, un solo Señor, un solo bautismo” (EF. 4,5) y explicó brillantemente, los herejes le gritaban: “Renuncie a lo que dijo hoy en el sermón o lo matamos”. El les respondió valientemente: “He venido para predicar la verdadera fe, y no para aceptar falsas creencias. Jamás renunciaré a la fe de mis antepasados católicos.” Aquel grupo de herejes, dirigidos por un pastor protestante, le gritaba: “O acepta nuestras ideas o lo matamos”. El les contestó: “Ustedes verán lo que hacen. Yo me pongo en manos de Dios y bajo la protección de la Virgen Santísima. Pero piensen bien lo que van a hacer, no sea que después tengan que arrepentirse muy amargamente”. Entonces lo atacaron con palos y machetes y lo derribaron por el suelo, entre un charco de sangre. Poco antes de morir alcanzó a decir: “Padre, perdónalos”.

Evangelio del día

San Lucas 24, 35-48

En aquel tiempo, los discípulos de Jesús contaron lo que les había pasado por el camino y cómo lo habían reconocido al partir el pan.

Estaban hablando de estas cosas, cuando él se presentó en medio de ellos y les dice:
«Paz a vosotros».

Pero ellos, aterrorizados y llenos de miedo, creían ver un espíritu.

Y él les dijo:
«¿Por qué os alarmáis?, ¿por qué surgen dudas en vuestro corazón? Mirad mis manos y mis pies: soy yo en persona. Palpadme y daos cuenta de que un espíritu no tiene carne y huesos, como veis que yo tengo».

Dicho esto, les mostró las manos y los pies. Pero como no acababan de creer por la alegría, y seguían atónitos, les dijo:
«¿Tenéis ahí algo de comer?».

Ellos le ofrecieron un trozo de pez asado. Él lo tomó y comió delante de ellos.

Y les dijo:
«Esto es lo que os dije mientras estaba con vosotros: que era necesario que se cumpliera todo lo escrito en la Ley de Moisés y en los Profetas y Salmos acerca de mí».

Entonces les abrió el entendimiento para comprender las Escrituras.

Y les dijo:
«Así está escrito: el Mesías padecerá, resucitará de entre los muertos al tercer día y en su nombre se proclamará la conversión para el perdón de los pecados a todos los pueblos, comenzando por Jerusalén. Vosotros sois testigos de esto».

Palabra del Señor

  •  ¿Somos capaces de descubrir en el mundo de hoy a Jesucristo?¿Qué tan difícil es como en aquella época de los discípulos?¿En que nivel esta nuestra fe?, hoy los discípulos pasan de una experiencia de miedo e incertidumbre a un encuentro con el mismo Señor que renueva su fe en él. En la actualidad estos encuentros transformadores con la presencia intima con Jesucristo son necesarios para ver el mundo de otra forma, en la Eucaristía podemos verlo de una manera más profunda que nos motiva a la acción.
  • Queridos hermanos la fe no es solitaria, se requiere de las comunidades para que está crezca y de fruto, debido a que al compartir las experiencias como el miedo, las dudas, las alegrías , las esperanzas, los temores con quienes nos rodean podemos contribuir a construir el reino de Dios, somos así Iglesia que camina hacia la esperanza en la unidad mutua. La fe esta unida a las obras no basta con creer debemos actuar.
  • La paz que Jesucristo ofrece a la humanidad entera no es pasiva es activa, una paz que recibimos como don pero que estamos llamados a impartirla en nuestros hogares, en donde estemos, evitando las divisiones, buscando el dialogo, y además encontrando puntos en común con quienes piensan diferente.

PRÁCTICA DIARIA

  • Pedir todos los día el Señor acreciente nuestra fe, y nos de la paz que sólo puede darnos él.
  • San Fidel nos dice: “Arraigados en el amor, lleguemos a conocer el poder de la resurrección de Jesucristo.” 

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