
SANTO DEL DÍA
SANTA CATALINA (KATERI)TEKAKWHITA(1656-1680)
Santa Catalina nació en Auriesville, Nueva York (Estados Unidos)ella era indígena , su madre era una cristiana de la tribu algonquina, capturada por los iroques y liberada por quien sería el padre de la santa, con tan solo cuatro años queda huérfana y también su hermano muere de viruela, ella también se contagia pero logra sobrevivir pero con el rostro desfigurado, con poca visión, sus tíos se hicieron cargo de ella, cuando tenía doce años conoce la fe cristiana gracias a unos misioneros jesuitas, luego pidió bautizarse en contra de las creencias de sus familiares y fue rechazada de la comunidad, huyó de su pueblo a unas comunidades cristianas en Canadá, hizo la primera comunión en navidad y los votos de castidad, además tenia una devoción al Bendito Sacramento, se dice que el día de su muerte a tan solo veinticuatro años muchos de los que fueron al funeral sanaron y a ella las cicatrices se le borraron de su cara.
Evangelio del día
San Juan 13, 1-15
Antes de la fiesta de la Pascua, sabiendo Jesús que había llegado su hora de pasar de este mundo al Padre, habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo.
Estaban cenando; ya el diablo había suscitado en el corazón de Judas, hijo de Simón Iscariote, la intención de entregarlo; y Jesús, sabiendo que el Padre había puesto todo en sus manos, que venía de Dios y a Dios volvía, se levanta de la cena, se quita el manto y, tomando una toalla, se la ciñe; luego echa agua en la jofaina y se pone a lavarles los pies a los discípulos, secándoselos con la toalla que se había ceñido.
Llegó a Simón Pedro, y este le dice:
«Señor, ¿lavarme los pies tú a mí?».
Jesús le replicó:
«Lo que yo hago, tú no lo entiendes ahora, pero lo comprenderás más tarde».
Pedro le dice:
«No me lavarás los pies jamás».
Jesús le contestó:
«Si no te lavo, no tienes parte conmigo».
Simón Pedro le dice:
«Señor, no solo los pies, sino también las manos y la cabeza».
Jesús le dice:
«Uno que se ha bañado no necesita lavarse más que los pies, porque todo él está limpio. También vosotros estáis limpios, aunque no todos».
Porque sabía quién lo iba a entregar, por eso dijo: «No todos estáis limpios».
Cuando acabó de lavarles los pies, tomó el manto, se lo puso otra vez y les dijo:
«¿Comprendéis lo que he hecho con vosotros? Vosotros me llamáis “el Maestro” y “el Señor”, y decís bien, porque lo soy. Pues si yo, el Maestro y el Señor, os he lavado los pies, también vosotros debéis lavaros los pies unos a otros: os he dado ejemplo para que lo que yo he hecho con vosotros, vosotros también lo hagáis».
Palabra del Señor
MEDITACIÓN
- Jesucristo en el Evangelio de hoy no hace un discurso solemne ni utiliza palabras ilustres, sólo se arrodilla para lavar los pies de aquellos hombres que no entendían lo que estaba pasando, este gesto de humildad nos enseña que el servicio comienza desde abajo, en el mundo de hoy los hombres buscan protagonismo, pero el Maestro nos enseña que para ser grandes se debe construir desde abajo con humildad y entrega de corazón.
- Para ser servidos también se requiere ser humildes, Pedro se sintió incomodo ante aquel amor incondicional que no pedía nada sólo dejarse servir, cuando el amor se nos manifiesta sin intereses nos podemos llegar a sentir extraños, el amor de Dios se nos revela así, es por eso que sólo debemos responder con apertura más que con perfección, reconocer que necesitamos de su amor para ser sanados, dejémonos ayudar por quien quiere nuestro bienestar sin pedir nada a cambio.
- En este Jueves santo el Señor no sólo pide que conmemoremos la Institución de la Sagrada Eucaristía su cuerpo y su sangre, sino que se nos invita más que saber a hacer, a servir como Nuestro Señor lo hizo, deber ser nuestra forma de ser, además este amor que se nos ofrece es libre, un amor que sirve sin controlar, un servicio que es paciente incluso con quienes nos traicionan, sin esperar aplausos, sin que nadie valore lo que hacemos eso hizo Jesucristo ese es el ejemplo que debemos seguir. Desde lavar un plato hasta escuchar a alguien con paciencia, puede parecer gestos pequeños, pero en el Reino de Dios las pequeñeces tiene un peso grande en la eternidad.
PRÁCTICA DIARIA
- Desde hoy realizaré un gesto de servicio con amor profundo y de corazón sin esperar nada a cambio.
- Santa Catalina nos enseña que para amar a Dios sólo se requiere apertura de corazón.
Hermoso Evangelio
Jesus nos hace meditar sobre el pecado y en realidad los q nos creemos q estamos limpios de pecado