
SANTO DEL DÍA
SAN FRANCISCA DE SALES (1844-1914)
San Francisca nació en Sézanne (Francia), fue bautizada con el nombre de Leonia, sus Padres la llevan al monasterio de la Visitación de Troyes, su educación cristiana la llevó a cabo en este lugar, su Padre buscó para ella un hombre rico de la región para que se casara una vez saliera del monasterio, pero para entonces ya ella había decidido ser religiosa, tiempo después fundo las “Obras para las trabajadoras jóvenes”, que se encargaba de educar cristianamente a las obreras que venían del campo, y las ayudaba en comida, y locales seguros. Tiempo después decide regresar al monasterio de la Visitación, y ahí toma el hábito y hace sus votos tomando el nombre de San Francisca de sales, luego funda la congregación de Oblatas de San Francisco de Sales, muchas jóvenes se unieron a ellas, la Santa les enseño el valor del trabajo considerándolo instrumento de caridad, San Francisca fue superiora general hasta su muerte, luego funda un internado de jóvenes socialmente acomodadas.
Evangelio del día
San Lucas 5, 12-16
En aquel tiempo, estando Jesús en un poblado, llegó un leproso, y al ver a Jesús, se postró rostro en tierra, diciendo: “Señor, si quieres, puedes curarme”. Jesús extendió la mano y lo tocó, diciendo: “Quiero. Queda limpio”. Y al momento desapareció la lepra. Entonces Jesús le ordenó que no lo dijera a nadie y añadió: “Ve, preséntate al sacerdote y ofrece por tu purificación lo que Moisés prescribió. Eso les servirá de testimonio”.
Y su fama se extendía más y más. Las muchedumbres acudían a oírlo y a ser curados de sus enfermedades. Pero Jesús se retiraba a lugares solitarios para orar.
Palabra del Señor
MEDITACIÓN
- Jesús siempre sintió compasión por los enfermos y en este pasaje bíblico no es la excepción, la lepra era una enfermedad que rechazaba el pueblo judío, quien la padecía sufría de discriminación, Jesús con autoridad ordenaba la sanación para cada enfermo que se le presentara en frente y a este hombre lo liberó y le pidió prudencia, pero los milagros no se podían esconder así que este hombre no tiene miedo de anunciar el poder del Maestro.
- Jesucristo no solo conoce lo externo del hombre, también conoce su interior, limpia y devuelve la dignidad a quien la ha perdido, este leproso es un claro ejemplo de la misericordia infinita de Dios con la raza humana.
- ¿De cuántas lepras debo liberarme en este momento? ¿Qué pecado me ha hecho perder mi dignidad de hijo de Dios?, muchas veces no solo poseemos la lepra sino que contagiamos a los demás, podemos manifestar repudio a nuestro hermanos necesitados, indiferencia ante el dolor del otro, hoy Jesús nos enseña no sólo a despojarnos de una vida llena de pecado, sino que nos invita reconocer en los demás su rostro y atender una mano llena de amor y misericordia. “Si sientes dolor, estás vivo. Si sientes el dolor de los demás, eres un ser humano”, no lo olvides!!
PRÁCTICA DIARIA
- Visitar un enfermo y contagiarlo de la alegría de Dios.
- San Francisca de Sales nos enseña que la educación es el camino para cambiar vidas.