LUNES, cuarta Semana de Pascua (ciclo b) -22 abril, 2024

SANTO DEL DÍA

San Cayo era originario de Dalmacia y pariente del emperador Diocleciano. La violencia de la persecución le obligó a vivir ocho años en las catacumbas. Sus sufrimientos por la fe le merecieron el título de mártir.

San Sotero por su parte sucedió a San Aniceto en la cátedra de San Pedro. Eusebio nos ha conservado una carta en la que San Dionisio, obispo de Corinto alude la paternal bondad del Papa, especialmente con los que habían sufrido por la fe en Cristo. Además, San Dionisio manifiesta que en las iglesias de Corinto se leyó una carta escrita por San Sotero junto con la carta del Papa San Clemente, considerada por algunos autores como la famosa “segunda carta de San Clemente”. La Iglesia venera a San Sotero como mártir, pero no existe ningún relato de su martirio.

Evangelio del día

San Juan 10,1-10

En aquel tiempo, dijo Jesús:
«En verdad, en verdad os digo: el que no entra por la puerta en el aprisco de las ovejas, sino que salta por otra parte, ese es ladrón y bandido; pero el que entra por la puerta es pastor de las ovejas. A este le abre el guarda y las ovejas atienden a su voz, y él va llamando por el nombre a sus ovejas y las saca fuera. Cuando ha sacado todas las suyas camina delante de ellas, y las ovejas lo siguen, porque conocen su voz: a un extraño no lo seguirán, sino que huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños».
Jesús les puso esta comparación, pero ellos no entendieron de qué les hablaba. Por eso añadió Jesús:
«En verdad, en verdad os digo: yo soy la puerta de las ovejas. Todos los que han venido antes de mí son ladrones y bandidos; pero las ovejas no los escucharon.
Yo soy la puerta: quien entre por mí se salvará y podrá entrar y salir, y encontrará pastos.
El ladrón no entra sino para robar y matar y hacer estragos; yo he venido para que tengan vida y la tengan abundante».

Palabra del Señor

  • Jesús en el Evangelio de hoy no solo se presenta como el Buen Pastor sino como la puerta principal, en la que sus ovejas puedan encontrar el camino para refugiarse, una imagen de un hombre que guía, cuida y sobretodo ama a quienes se les ha confiado. Jesús revela autoridad al llamar a las ovejas por su nombre, no tiene que saltarse las normas de los Pastores, sino que con su poder mesiánico tiene potestad de traerlas sin obstáculos pues él va adelante, dirige e indica el camino a seguir.
  • Muchos serán llamados pero pocos elegidos, ellos reconocen la voz de Jesucristo, le seguirán sin hipocresía, sino que consientes de su llamado atenderán a su voz tierna, dulce diferentes de los demás pastores, de aquellos que se han saltado el mandamiento del amor, y han querido poseer las ovejas mediante engaños, Jesús se hace así mismo el camino definitivo para salvarse para obtener vida y en abundancia, un camino capaz de transformar y de nacer a una vida nueva junto al verdadero Pastor.
  • Quienes han resucitado deben saber que voz escuchar, porque puerta entrar, ya se inicia un cerrar puertas que nos llaman a las fuerzas del mal, nuestro Pastor hermoso nos muestra el verdadero redil, no podemos ir tras voces oscuras, sino que endulzados por la voz de nuestro salvador, crucemos la puerta que nos conducirá a fuentes tranquilas a pastor verdes y duraderos.
  • En este mundo el maligno actúa como lobo, silencioso, cauteloso, que nos envuelve en felicidades temporales, ensordeciendo nuestro corazón para evitar escuchar el amor que es Jesucristo vivo y santo, si buscamos hacer el bien vamos por él que es el camino y la vida, una advertencia en estos tiempos es caminar en la Iglesia que Jesús inicio, no podemos saltar con tal de avanzar más rápido, debemos buscar la unidad, siempre la común – unión siempre en rebaño, siempre con nuestro PASTOR JESUCRISTO que guía e indica el camino exacto que nos conducirá al cielo.

  PRÁCTICA DIARIA

  • Leer el Catecismo de la iglesia católica acerca del Buen Pastor.
  • Santos Cayo y Sotero fueron testigos del mensaje de Jesús, murieron por construir Iglesia y nunca salieron del redil, sino que se mantuvieron firmes en la fe que había recibido.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *