
SANTO DEL DÍA
SANTA PAULINA DEL CORAZÓN AGONIZANTE DE JESÚS (1865-1918)
Santa Paulina nació en Vígolo Vattaro (Trento,Italia) , recibió la primera comunión a los 12 años de edad, comenzó a participar del apostolado parroquial, en las labores de limpieza de la capilla de Vigolo así como las visitas a enfermos, junto con dos amigas dió inicio a la Congregación de las Hermanitas de la Inmaculada Concepción tomando como nombre Paulina del Corazón Agonizante de Jesús. La vida de Santa Paulina y de sus compañeras atrajó vocaciones a pesar de las condiciones difíciles por las que atravesaban. Fue elegida superiora de “ad vitam” para estar pendiente del cuidado de los huérfanos y de esclavos de edad avanzada en Ipiranga. Durante su vida consagrada se dedicó a la oración, al trabajo y al sufrimiento con el fin que su congregación siguiera creciendo y Jesucristo fuera conocido y adorado por todo el mundo. Antes de su muerte se dedicó al servicio de las hermanas enfermas de su congregación, por eso en el pueblo de Vigolo la llaman “la enfermera”, al padecer una diabetes muere por esta enfermedad y en su sufrimiento sólo decía que se hiciera la voluntad de Dios, hizo un testamento antes de su muerte que decía “ Sed muy humildes. Confiad siempre y mucho en la Divina providencia, nunca jamás os desaniméis, aunque vengan tiempos contrarios” toda su vida encaminada a ser fiel.
Evangelio del día
San Mateo 11,25-30
En aquel tiempo, tomó la palabra Jesús y dijo:
«Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos, y se las has revelado a los pequeños. Sí, Padre, así te ha parecido bien.
Todo me ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce al Hijo más que el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar.
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré. Tomad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera».
Palabra del Señor
MEDITACIÓN
- Esta oración de agradecimiento que Jesús hace al padre celestial, es una muestra de la inmensa compasión de Dios hacia quienes deciden escuchar a Jesucristo, la mirada de Jesús va hacia quienes quieran sentirle de verdad en sus vidas, la obra de Dios siempre escogerá personas comunes y corrientes, pues en ellas sus limitaciones y pecados los hacen necesitados de su amor, en estas gentes Dios se gloría, en lo humilde en lo pequeño. Jesús revela un mensaje salvífico para aceptarlo y seguirlo, enseñando a sus oyentes la relación armónica que tiene con Dios, pues quien lo acepta sigue al Padre.
- Jesucristo invita a dejar las cargas sobre él, motiva a caminar sin detenerse que aunque cansados él será el alivio, que aunque fatigados el renovará las fuerzas, venid a mi es una frase que llena de esperanza a quien pueda estar pasando por momentos difíciles, quizás la gente a quien Jesús hablaba en este pasaje bíblico eran personas cansadas de nadar contra la corriente, y Jesús aprovecha la oportunidad para dirigirse a quienes necesitan una voz de esperanza y consuelo, Jesús se muestra así mismo como el descanso que alivia el alma y que recarga una vida fatigada por el pecado, ofrece un corazón manso y humilde que ama sin condiciones, que abraza aun a pesar de las miserias de la misma persona.
- Cuantas veces hemos escuchado la voz de Dios que nos invita a experimentar su inmenso amor, a reposar en él para obtener su paz, pero cada vez ponemos nuestra confianza en personas y en cosas, creemos que somos capaces de ir por este mundo sin la presencia de Jesús, y el peso de nuestras cargas nos hacen caer en los lugares equivocados. Jesucristo nos ofrece su corazón desbordado de amor y compasivo, quiere atraernos a todos y llevarnos al Padre. El agradecimiento debe ser parte de mi vida, es Dios quien me escoge en mi pequeñez, no siendo merecedores de su bondad nos trata con mansedumbre y aun en la oscuridad nos rescata a cada momento para que lo hagamos parte de nuestra existencia, siendo el la luz que disipa toda tiniebla. Debemos imitar a Cristo en su humildad y acercarnos a él reconociendo nuestras debilidades, y dejando que nuestro corazón humillado sea restaurado por su compasión infinita.
- ¿Dejamos que nuestra vida sea dirigida por Jesús? ¿Nuestros fracasos, sufrimientos y dolores son dejados en sus manos para que él nos muestre en el camino lecciones de vida?, queridos hermanos cuando nos disponemos a conocer y seguir a Jesucristo nuestra vida será llena de esperanza, y es así como seremos glorificados en nuestras propias cruces, Jesús nos enseña que para llegar al padre debemos reconocer nuestras pequeñeces y el reino de Dios llegará a nosotros, que si confiamos en él lo pesado es liviano, que al sentirlo en nuestro corazón y al hacerlo nuestro refugio nunca seremos defraudados.
PRÁCTICA DIARIA
- Visitar a alguien de mi comunidad que se encuentra sin motivación, llevarle la palabra de Dios e invitarlo a la santa misa, y a que se refugie en Dios por medio de la oración y del amor que nos ofrece.
- Santa Paulina nos enseña que hacernos servidores de quien nos necesitan nos hace capaces de sobrellevar cualquier clase de sufrimiento siempre y cuando caminemos con Jesús.